jueves, 30 de agosto de 2012

Anne Freaks

 
He olvidado tantos libros...
Hace algunos años, la primera vez que me compré y leí este manga ya hablé de él, siempre tuve un muy mal recuerdo del mismo e incluso una vez les indiqué a unas chicas en una tienda que no lo compraran, sin embargo, habiéndolo olvidado un poco decidí darle una segunda oportunidad. Encontrándome con sorpresas inesperadas.
La historia.
Anne Freaks cuenta la historia de Yuri, un chico triste y atormentado cuya primera imagen que tenemos de él es matando a su madre ¿por qué? Aún tardarán en darnos motivos de ello y con los retazos que nos dan no nos llega a quedar ni muy claro ni a chocar demasiado. De pronto, una chica llamada Anne, que le recuerda a una niña que sale en sus sueños recurrentes cubierta de sangre, aparece en su vida ayudándole a deshacerse del cadáver y a comenzar de cero. Anne, como pronto descubrirá Yuri, es una asesina que está dispuesta a matar a su propio padre, jefe de una secta terrorista. Los dos, con ayuda de otro chico llamado Matsuda intentarán eliminar a la secta. Yakuzas, médicos que trabajan para la mafia y policías se verán envueltos en esta trama, la cual gracias a los respiros cómicos de la autora a través de gags y viñetas llenas de gente con cara de emoticono nos ayuda a pasar las grandes dosis de sangre.
 
Los personajes
Lo que en un principio pueden parecer personajes planos, no lo son en absoluto, la historia en determinados momentos nos plantea la situación desde los distintos puntos de vista y vemos las inquietudes y motivos de todos los personajes. Como mínima queja yo hubiese profundizado más en los mismos. No obstante en los cuatro tomos  nos deja bastante claro las personalidades de cada uno.

Dibujante y dibujo.
La autora es Yua Kotegawa, una joven mangaka que conocemos aquí por otra de sus obras sacadas al mercado español poco después de “Anne Freaks”, Line.
Su dibujo es simple y limpio, a pesar de ello se diferencia bastante bien a los personajes y es muy detallista con la ropa (sobre todo la que viste Anne).

Planeta y sus ediciones con tapas.
Este manga es del 2006, Planeta nos acababa de empezar  a traer ediciones con tapas (lejos de esos tomos sin ellas como Detective Conan o  Tokio Babylon a 6 euros), no estaban mal, aunque el precio subía un poco, los 7,50 se pagaban bien (sobre todo viendo los 9 euros que Norma nos quitaba con algunas obras que no llegaban ni llegan a la altura del precio con la edición).

Yo me quejo, tú te quejas él se queja.
Puf, apenas tardé un par de horas en releerme los tomos, y aunque apenas recordaba  los motivos de mis quejas ni el argumento principal, intenté alejar el mal sabor de estómago que me dejó su primera lectura y comencé de nuevo… Mal hecho. La historia está bien, un pelín violenta, pero como ya he descubierto con lo que tengo comprado soy mujer de lecturas violentas. Los personaje están bien y el dibujo está bien… Hasta el último tomo. Diría que a la autora no le permitieron dar más capítulos de los que quería pero no lo creo pues hay viñetas y viñetas de relleno al final. Los personajes actúan al tuntún y su personalidad cambia como si fuera ponerse un pantalón nuevo. De pronto no comprendes nada de lo que ha pasado y hace un corte en la historia extraño, en el cual personajes mueren porque sí, otros quedan en coma porque sí y el argumento principal se va al garete, con una protagonista a la que si en algún momento tuviste empatía, ahora quieres sacarle los ojos. En definitiva un bodrio de final para una lectura amena con un argumento interesante. Una pena de 7,50 gastados en el último tomo.
 
Nota.
4
Leer si te gusta/ si te ha gustado lee:
¿De veras te ha gustado? ¿De verdad crees que se parece a algo que te hayas leído? Creo que a ambas la respuesta es NO.
Anotación:
La nota sería mucho más alta si no existiera el último tomo, en serio.
 

miércoles, 29 de agosto de 2012

Revisionando en el pueblo


 

Varios días en el pueblo te pueden dar para muchas cosas, a mí sobre todo me sirve para estudiar, pero la mayoría del tiempo libre lo uso para leer, algún libro que tengo por ahí (este año le tocó al “Haiku de las palabras perdidas” y a “Vampiria”, un tomo recopilatorio de historias del mito vampírico desde principios del XIX a principios del XX, un siglo entero con narraciones de Lovecraft o Poe).

Sin embargo no es eso de lo que quería hablar, resulta que ahí, bonita, mirándome cada mañana cuando me despierto está una estantería en su mayoría llena de mangas (llena de otras cosas pero sobre todo de japonesadas, qué queréis, tuve una adolescencia), me llama. Y claro una que no es de piedra y que lo más interesante que hace aquí es recibir cartas del mundo exterior, llamar cuando una raya de cobertura se cruza en su camino y mirar los girasoles nuevos que han puesto en el campo donde no había nada desde que desaparecieron las vacas… Pues nada, que le eché un vistazo a las obras que tenía. Algunas mejores, otras peores y algunas cuya opinión cambió bastante con un segundo visionado y un punto de vista, siendo sinceros, un pelín más maduro.

Pues esas son las entradas que iré poniendo a partir de ahora. Espero no aburrir a unos y a otros. Ha sido un verano largo.